Larioja.com 08.12.15

El colectivo, integrado en La Rioja por algo más de 18.000 personas, representa el 6,70% de la población total de la región. Con una partida presupuestaria para el próximo año de 11,53 millones de euros que servirán para mantener las 206 plazas residenciales y aumentar hasta las 216 las de centros de día y a 338 las de centros ocupacionales, el reto pendiente sigue siendo el de la inserción de estas personas en el mercado laboral, donde aún queda mucho camino por recorrer.

Con una media mensual este año de 1.239 personas con discapacidad en demanda de empleo, el 2015 va a cerrar con buenas cifras, ya que en los diez primeros meses del año se han suscrito en la región 1.874 contratos, lo que supone un incremento del 24,97% respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, esa contratación apenas representa el 1,45% del total de acuerdos laborales suscritos hasta octubre.

Sí mejoran las estadísticas de este colectivo en cuanto a la calidad del empleo, ya que el 8,44% de esos contratos han sido de carácter indefinido (156), lo que a su vez supone un incremento interanual del 17,29%. En el mercado laboral general riojano, sólo el 6,36% de los acuerdos laborales firmados han sido fijos.

El éxito de Inter Europa

Para impulsar esa inserción laboral, el Centro de Valoración de la Discapacidad y Dependencia de la Dirección de Servicios Sociales cuenta con un servicio de orientación laboral, que en lo que llevamos de año ha emitido 175 certificados de capacidades a efectos de demanda de empleo (162 en todo el 2014) y 249 informes de adecuación de puesto de trabajo (73 en el pasado ejercicio). Además, el Gobierno de La Rioja mantiene activas diversas medidas, en una doble vía: con ayudas a empresas para la contratación indefinida de personas con discapacidad, una iniciativa que el año pasado benefició a 37 trabajadores; y con subvenciones para el mantenimiento de puestos de trabajo en los CEE (Centros Especiales de Empleo), que al cierre del pasado año contaban con una plantilla de 393 personas con discapacidad, 264 de ellos con itinerario personalizado.

Pero en este viaje es clave además el papel de las entidades y asociaciones, como Inter Europa, cuyo programa de formación laboral está en pleno despegue. «Está siendo un año excepcional porque hemos firmado ya 17 contratos y más de la mitad son indefinidos, por lo que estamos muy contentos. Son algo más del 50% de la treintena de contratos conseguidos desde que en el 2009 pusimos en marcha el Área de Empleo», se felicita Enrique Visairas, su responsable.

En el éxito de la asociación, nacida en el 2003, tiene mucho que ver su novedoso sistema: «Aplicamos una metodología de empleo con apoyo, lo que da mucha seguridad a la empresa contratadora», avanza Visairas, quien explica que «no tenemos cursos específicos, se hace una preparación general teórica y, a continuación, en cuanto hay posibilidad, la formación práctica en una empresa. Al principio la presencia del preparador laboral de Inter Europa es constante e intensiva en el puesto de trabajo y a medida que empiezan a ser autónomos desaparece».