Foro de la Contratación Socialmente Responsable

Fundación ONCE apuesta por innovar en responsabilidad social para avanzar en inclusión

Servimedia 01/07/14

Según afirmó, el impulso de las políticas de RSC por parte de las empresas, administraciones públicas y organizaciones supone “una gran oportunidad” para avanzar en normalización. En este sentido, la sostenibilidad “debe contemplar la igualdad de oportunidades y la no discriminación, así como la inclusión social de grupos desfavorecidos”. Para el vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, la sostenibilidad “no puede entenderse si no contribuye a la cohesión social”.

Además, Durán manifestó que las personas con discapacidad constituyen un “grupo de interés al que tener en cuenta a la hora de adoptar políticas transversales de RSE y acción social”, entre las que destacó las que promuevan el acceso por parte del colectivo al mercado de trabajo.

Por ello, continuó, los procesos de gestión de Recursos Humanos “deben tener en cuenta las necesidades específicas de las personas con discapacidad, especialmente la adaptación del centro y del puesto de trabajo”.

Para el vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, la accesibilidad a las nuevas tecnologías “es determinante para evitar la exclusión”. A este respecto, propuso a empresas y administraciones públicas suprimir barreras de acceso a la sociedad del conocimiento, garantizar la interoperabilidad y adaptabilidad de las tecnologías, promover las tecnologías inclusivas como factor de competitividad y garantizar la accesibilidad en la 'e-administración'.

También abogó por apoyar la investigación en el ámbito de las tecnologías accesibles e implantar un currículo formativo en materia de accesibilidad, con el fin de generar un mercado de profesionales con competencias técnicas en diseño para todos.

Por último, Durán apuntó que el actual contexto de crisis económica que vive España “requiere reflexionar sobre la necesidad de actuar más y mejor para paliar en la medida de lo posible sus consecuencias sociales, teniendo en cuenta especialmente a los colectivos más desfavorecidos”. El camino a seguir, concluyó, “pasa por la colaboración y la unión de las voces de los consumidores, empresas, grupos de interés y responsables políticos”.